19/7/07

Aromas

El aroma a papelera mal tapado con desodorante de elegancia le producía nauseas. Su aroma favorito el del abono mezclado con las flores que abona. Tan solo no podía soportar los olores artificiales tapando a los naturales. ¿Cómo puede un olor creado de mentiras y apariencias pretender ganarle la partida a un olor natural y creado para dar y compartir vida?

4 comentarios:

Fernando dijo...

vivimos de mentiras...no te extrañe que todo lo que queramos sea plástico perfumado...besos

Anotherdia dijo...

No creo Fernando, me refería a esas personas que van de lo que no son. A los que miran por encima del hombro, quieren colar tonterias por verdades, son unos estirados, hablan de todo sin saber de nada y se creen que por eso son mejores. Lo siento pero a mi me dan nauseas. Besos.

Marta Sanuy dijo...

Entonces te refieres a la que compra los domingos la razón y el mundo y dos barras de pan sin hablarnos, que ya es mérito:

-Es una hormiga subida en una canica

me dijíste un día. Y me encantó.
Para el documental.(he estado trabajando con Bea y con Clau estos días, seis paquetes de pipas se comieron en la puerta mientras yo hacía la noche: grandes avances)

Anotherdia dijo...

Sí, que mal me caen...uf. Un beso.