Un día, el borreguito le pregunto a mama oveja.
- Mami, cuando sea grande ¿Podré ir por los tejados, como ese animal de tantos colores?
- No hijo mio. Le contesto la oveja
- ¿Y podre posarme en lo alto del campanario ?
- Si eres capaz de subir a lo alto, cariño. Contestó la madre
- Ah!, ya se lo que podre hacer, dijo todo contento el borreguito. Despertare a todo el pueblo, con el primer rayo de sol, que salga al amanecer.
- La madre, esta vez se calló.
5 comentarios:
...este es un borreguito con plumas...
Gracias por pasarte por mi blog y por tu comentario.
Si me dejas, seguiré leyéndote...Tu espacio emana mucha ternura...
Un abrazo..
Gracias por tu comentario, tu blog es más que interesante, yo también me pasaré por aquí de vez en cuando...
Saludos!
Al reves.Primero, despues de leeros es un honor veros aqui y segundo gracias lia y noa, por pasaros y por dejarme esas notas tan bonitas. muchos besos para las dos.
Saludos, te dejo un saludo(redundante soy jeje), bloguee buscando peña que le gustara Extremoduro y esta bien saber que somos muchos jeje...Interesante tu blog...
Muy bueno. Me gusta esa búsqueda de sí mismo del borrego.
un abrazo.
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